De 2016 a 2022 el precio de la vivienda en México subió 56.9 por ciento, lo que contrastó con el incremento del ingreso por trabajo de las familias, que sólo avanzó 2.5 por ciento en el mismo periodo, dificultando que la población de menores recursos acceda a un inmueble propio, según el Informe Situación Inmobiliaria, de BBVA Research al segundo trimestre 2024.
En conferencia, Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA, y Samuel Vázquez, economista principal de BBVA, explicaron que el alza del precio de la vivienda es positiva a nivel macroeconómico para quien es dueño de la propiedad, porque aumenta la riqueza patrimonial, pero es adverso en el caso de las personas que no pueden acceder a una casa porque “cada vez es más costoso”.
Por ello, Samuel Vázquez explicó que con base a datos de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares (ENIGH) de 2016 a 2022, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la diferencia entre el ingreso y gasto en el citado periodo es resultado de “la fuerte contracción en 2020, por la pandemia y aún cuando en 2022 hubo una recuperación, esto apenas alcanza a superar los niveles a 2016”.
Carlos Serrano indicó que el crédito hipotecario aumento en el primer semestre de 2024, 11.4 por ciento a tasa anual, con un total de 232.9 mil financiamientos; mientras que el monto originado aumento 2.2 por ciento más en comparación con el primer semestre de 2023.
Sin embargo, reveló que este crecimiento se da por un avance de créditos en el sector público, en tanto que, la banca cae de 61.1 mil hipotecas otorgadas en el primer semestre de 2023 a 57.4 mil financiamientos en 2024, esto es una baja de 6.8 por ciento anual.
En su comparación al segundo trimestre, el financiamiento se ubicó en 30.4 miles de créditos, contra 27 mil del trimestre previo, mostrando el inició de una posible recuperación de los créditos bancarios.
MAAZ
