Guillermo Rosales, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, dio a conocer que la estacionalidad del mercado que se enfrentó en julio ocasionó que la racha de ventas positivas fuera menor en dicho mes. Además de esto, apuntó, la cadena logística en la entrega de estos productos se ha visto retrasada, lo cual también incide en el comercio.
Ante los micrófonos de la señal de televisión de El Heraldo Media Group, el representante del sector comentó que desde los puertos asiáticos del Pacífico llegan el 60 por ciento de los vehículos que complementan el mercado interno, lo cual también ha causado desajustes que se están analizando.
«Estamos enfrentando retrasos a la deficiencia del sistema aduanero».
Destacó que los cambios que se han establecido por parte del gobierno de Andrés Manuel López Obrador generan problemas en la atención al mercado exterior, al igual que en otros sectores.
Dio a conocer que el problema es tan grave que hay embarques que estaban programados en julio y por los cuales no hay una fecha establecida, aunque se espera que lleguen en agosto.
Añadió que agosto y septiembre son meses con menos demanda de este tipo de unidades, debido a que están asociados con el regreso a clases y las vacaciones de verano, así con los compromisos económicos que tienen las familias por estas fechas.
Indicó que el último trimestre de 2023 y el primer mes del 2024 son periodos en los que se prevé un incremento sustancial en la colocación de vehículos.
«Estamos esperando un cierre fuerte».
Añadió que la recuperación que tenido la industria permite prever que se vendan más de un millón 130 mil unidades al final de 2023, por lo que se tendrá un cierre mejor que el que se tenía previsto.