El gobierno federal presentó ayer ante la Comisión Nacional de Mejora Regulatoria (Conamer), el anteproyecto del decreto que busca poner en marcha siete rutas de trenes de pasajeros que transitarán por las vías de carga que ya existen en el país.
El gobierno comunicó que permitirá la participación de las ferroviarias privadas, las cuales tendrán hasta el 15 de enero de 2024 para presentar sus propuestas; de lo contrario, la responsabilidad recaerá en las Secretarías de la Defensa y la Marina, que ya operan el Tren Maya y el Tren del Istmo de Tehuantepec.
Las siete rutas que considera el proyecto son: México-Veracruz-Coatzacoalcos; el Interurbano AIFA-Pachuca; el México-Querétaro-León-Aguascalientes; El Manzanillo-Colima-Guadalajara-Irapuato; el ferrocarril México-San Luis Potosí- Monterrey-Laredo; México Querétaro-Guadalajara-Tepic-Mazatlán-Nogales y Aguascalientes-Chihuahua-Ciudad Juárez.
El proyecto aclaró que en las vías generales de comunicación ferroviaria concesionadas se dará preferencia a la prestación del servicio de pasajeros y se respetará el de carga en términos de lo dispuesto en la concesión respectiva.
De acuerdo con información de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes y la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario, las principales empresas asignatarias y concesionarias en el país son: Canadian Pacific Kansas City, Ferromex, Ferrosur y Ferrovalle.
En la conferencia matutina del 8 de noviembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que el objetivo es destinar unos 20 mil kilómetros de vías férreas al servicio de pasajeros.
Por Enrique Torres
MAAZ
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