Luis Miguel volvió renovado a los escenarios en el arranque de su gira por el continente americano: pese a que un periodista en Argentina advirtió que está utilizando dobles en sus conciertos en el Movistar Arena de Buenos Aires, la explicación detrás de su cambio físico radicaría en una desafiante dieta con la que bajó cerca de 20 kilos.
Dado que no es un usuario activo en redes sociales, ciertos seguidores de Luis Miguel consideraron fiable la teoría de Luis Ventura: este manifestó que El Sol de México tenía alternaba con 3 dobles en sus presentaciones, dado que sus expresiones, movimientos, tamaño de ojos, hombros, dientes, orejas y boca no coincidían con los del cantante verídico.
Pero no hay nada más lejos de la realidad. Especialistas como ShaunTrack y Pablo Vargas han determinado que, desde el aspecto musical, los registros vocales de Luis Miguel no han cambiado y son muy difíciles de alcanzar. Por ende, la transformación corporal con la que dejó atrás 20 kilos sólo tiene sentido a partir de una dieta.
¿En qué consistiría la dieta con la que Luis Miguel bajó 20 kilos?
Durante una entrevista con El Hormiguero de España, Luis Miguel habría admitido realizar ayunos intermitentes; con tal de producir energía a partir de las grasas almacenadas. Ese es el fundamento de la dieta con la que consiguió bajar 20 kilos de peso de cara al comienzo de su gira. Pero ojo, porque realizó algunas modificaciones para adaptarlas a su caso en particular.
Luis Miguel sentenció que los ayunos intermitentes suelen ser de 12 horas para alcanzar los resultados esperados, sin exponer la salud. Sí, es cuestión de comer después de efectuarlo. Sin embargo, en su situación, modificó la cuota a 36 horas; advirtió que está regulado por un médico y que no sugiere a la gente seguir su ejemplo.
Su alimentación estaría compuesta de diferentes grupos de alimentos: fibras, verduras, proteínas magras, frutas y grasas saludables. Es un tipo de dieta que favorece a disminuir los niveles de triglicéridos y colesterol, así como la prevención de la diabetes. No obstante, estimularía la deshidratación, el estreñimiento y los problemas renales. Por eso es necesario acudir con un experto.
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